Atesoramos una amplia experiencia en trabajar con familias, colonias (infantiles y juveniles) y con empresas de tiempo libre. El ritmo de vida y el entorno de la ciudad dificultan a los niños la posibilidad de crecer en un entorno natural, por ello, facilitar el contacto con los caballos y otros animales es una actividad enriquecedora para ellos. El aprendizaje de su monta, cuidados y mantenimiento es muy beneficioso, de esta manera, desarrollan el sentido de la responsabilidad a través del cariño por el caballo y el interés por su bienestar.